Como lo había programado una semana anterior, este viernes partía muy temprano como de costumbre a las carreteras del valle, sin embargo durante la salida me tome confianza en poder terminar labores antes de medio día y salí a las seis de la mañana, muy tarde por cierto. A alturas de Tulua comenzó a llover y tuve que aminorar el paso hasta Cartago, en donde comenzaba mi trabajo.
Cuando acabe con uno de los equipos, el siguiente pensé que seria cuestión de minutos, pero se incremento a dos horas ya de tenia que conseguir material de empaque para transladarlo a Cali continuando con el retraso.
Solo después de las dos de la tarde pude salir de Cartago, según mis cálculos, muy errados, tan solo me faltaban 5 horas para llegar a mi destino, una hora después sintonicé con el Tunein una emisora para poder escuchar el partido de fútbol entre Colombia y Chile y me acomode el impermeable, ya que nuevamente comenzaba a lloviznar. Todo esto cerca al peaje de Chinchina.
El recorrido fue tranquilo y se me hizo corto, a pesar de que la señal de internet en el celular se perdió y no podía escuchar la trasmisión del partido. En mitad de la nada se me ocurrió llamar a un compañero del taller para que me informare la referencia de unos triacs que podría conseguir en Medellin, mas él me contesta que esta en casa, habían autorizado salir temprano del trabajo para ver el partido y que se estaba perdiendo tres a cero.
Creo que era la 5 y media cuando llegue a La Pintada, me detuve en la parada refrescante de siempre y me senté a escuchar algo de la transmisión y a reservar el hotel, en esos minutos se marcaron dos goles, con los cuales, Colombia empataba.
Me cogió la noche y no veía cercana mi meta, los autos me dejaban casi ciego cada vez que los encontraba de frente, algunos ni siquiera ponian luces bajas, en un bar en medio de la nada, me detuve y me coloque los lentes de contacto, al menos de esta forma no se empañaban y mi vision mejoraba.
Llegue a las 9 de la noche al hotel, el GPS, me guió perfectamente, pero un descuido, me llevo una cuadra mas adelante y me obligo a tomar un retorno que me llevo a una zona bastante fea, mi primer pensamiento fue del que había mucha gente celebrando el empate, casi victoria, de la selección, no obstante cuando pase mas cerca me di cuenta que había mucho travesti y que la zona era de tolerancia, el hecho de que estuviesen alli no era sino por otra cosa. Me asuste un poco y giré en la primer esquina y guarde el GPS. Tome otra ruta, un poco mas amplia, y llegue a la cuadra del hotel, sin embargo no recordaba el numero, me pase unas siete casas y tuve que retroceder poco a poco hasta llegar a la portería que esta enseguida de la esquina, junto a una panadería.
Este recorrido en carretera lo cumplí en un poco mas de 10 horas, excluyendo las cuatro que pase en Cartago trabajando, realmente no me sentía fatigado, creí que podía estar mas tiempo en pie, sin embargo a media noche comenzaba a dormirme hasta de pie.
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